Macy estaba muy involucrada
A pesar de la opinión mayoritaria del personal del refugio, Macy, la nueva empleada, no estaba dispuesta a considerar la eutanasia como una opción. Ella estaba decidida a encontrar una solución que permitiera a la golden retriever y sus cachorros sobrevivir. A pesar de su falta de experiencia, se había dedicado a cuidar del perro preñado desde el primer momento en que llegó al refugio. Se aseguró de que la madre recibiera la atención necesaria durante su embarazo y estuvo presente durante el complicado parto de los cachorros. Macy estaba comprometida con la misión del refugio y no estaba dispuesta a ceder ante la idea de sacrificar a la madre y a sus cachorros.
Le gustaban mucho los perros
Durante su viaje, Macy tuvo la oportunidad de trabajar con una organización que se enfocaba en la ayuda a animales callejeros. Fue una experiencia conmovedora para ella y le abrió los ojos a las muchas formas en que los humanos podían mejorar la vida de los animales. Desde entonces, Macy sabía que quería dedicar su vida a ayudar a los animales de la manera que pudiera. Y así fue como terminó en la estación de rescate, donde pudo hacer una verdadera diferencia en la vida de Bella y sus cachorros. Aunque todavía no sabía cómo iba a lidiar con los cachorros de aspecto extraño que había dado a luz Bella.